Tocoa. Cuando decidió emprender su negocio, sus amigos se burlaron de él, pues creían que las ideas innovadoras y revolucionarias de Fernando Hernández, no estaban a su tiempo y al lugar. Ahora es un genio referente de las impresiones 3D, en la ciudad de Tocoa, departamento de Colón.
Con su negocio Estilos y Sonrisas, Fernando, ha logrado posicionarse en un mercado poco convencional, y desde aquí suple con sus creaciones en tres dimenciones, a negocios en el resto del país.
«No me imaginé llegar a este nivel», comenta este emprendedor, que no olvida aquella necesidad de trabajo, que lo obligó a iniciar su propio negocio.
«Debido a la falta de oportunidades, y a la necesidad de superarme decidí emprender este negocio», relata, ahora ya establecido en el barrio El Triunfo, de esta ciudad.
Con equipos de impresión láser, este joven hace cualquier pieza que el cliente desee, desde figuras de ánime hasta piezas de artículos.
«Nosotros la fabricamos con la máquina de impresión 3D», explicó. Dijo que para el próximo mes de julio, le llegará otra máquina más moderna, con la que podrá hacer piezas de vehículos.
Desde una figura de un dibujo animado hasta detalles y adornos personalizados se pueden hacer en este pequeño laboratorio de ideas tridimensionales.

Crear prototipos con una impresora, era solo para ciudades desarrolladas, pero ahora Tocoa ha dado ese salto, que la pone a la vanguardia con las tecnologías asistida por ordenador.
Su sueño todavía no termina para Fernando, pues sigue capacitándose para hacer figuras más profesionales y de otros materiales.

«Como hacer prótesis, lamentablemente en Tocoa, no se cuenta con ese conocimiento para hacerlas, de plástico o de otros materiales», expresó Hernández.
Sus obras ya se exhiben en barberías y también en eventos, pues aquí está la capacidad tridimensional para hacerla al gusto del cliente. Un detalle personalizado que ya no está al otro lado del mundo; está en Tocoa.

Los interesados pueden comunicarse con este emprendedor a los números telefónicos 3179 4235 o 98870051.
Colaboración/Roberto Hernández